Diego Olórtegui, el peruano que dibuja para Marvel y DC: Si no me divirtiera, habría tirado la toalla

Uno de los peruanos que se internacionalizaron gracias a su talento es Diego Olórtegui, quien ahora dibuja para Marvel y DC Comics por su gran destreza con el lápiz y el papel. Ahora, el artista de 35 años es un símbolo de admiración para grandes y pequeños que disfrutan de superhéroes como Spider-Man, Batman, Aquaman, entre otras figuras. La República tuvo la oportunidad de conversar con el dibujante, quien contó detalles sobre su vida laboral.

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Diego Olórtegui descubre su pasión por el arte

Esta pasión fue descubierta cuando Diego Olórtegui tenía 2 años y su hermano le enseñó a crear trazos con palitos, pero con los años sus ganas por mejorar crecieron y empezó a recrear los personajes que veía en televisión. A diario, sus familiares calificaban sus dibujos, lo cual era un incentivo para él, hasta que su padre le regaló su primer comic.

"Yo tenía 7 años. Mi papá me compró mi primer cómic y quedé maravillado. El arte me pareció muy muy chévere, muy bueno, y todo el tema de narrar por paneles, tanto es así que, de solamente hacer ilustraciones que me gustaban, comencé a crearle historietas a todo lo que veía. Veíamos a Dragon Ball y Caballeros del Zodiaco y le hacía una historieta", relató.

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¿Cuáles fueron los primeros dibujos de Diego Olórtegui?

Como se recuerda, a fines de los años 90, la caricatura más vista por los niños y jóvenes era Dragon Ball Z, un anime de acción en el que Goku era el personaje principal y, junto con sus amigos, iba en busca de las esferas del dragón. Estos personajes fueron de mucha inspiración para Diego Olórtegui, quien con 7 años empezó a realizar sus primeros cómics.

La experiencia laboral del dibujante antes de ser contratado por Marvel y DC Comics

Diego Olórtegui contó que su familia también valoraba mucho el talento que él tenía, por lo que le recomendaron que estudie Diseño Gráfico o Arquitectura; sin embargo, ninguna de estas carreras lo convenció e ingresó a un instituto para estudiar Cine y Animación. Con el tiempo, ingresó al mundo de la publicidad, pero este terreno tampoco lo convencía.

"Hacía storyboards, diseños de personajes, diseños de escenario. Bueno, mi experiencia no fue muy buena porque, para mí, era un poco frustrante hacer este tipo de trabajos. Yo quería siempre hacer algo como lo que hacía de pequeño, dibujar historietas o al menos unos storyboard, donde ocurran cosas fantásticas. Me mandaban a hacer un storyboard de un comercial de cerveza, planos aburridos, las personas brindando, conversando y ya. Yo quería explosiones, quería acción", señaló. Así era su vida hasta que su hermana le dio una gran idea: postular a Marvel.

El día que Marvel se contactó con Diego Olórtegui

Luego de comprar unos cómics de Spider-Man, la hermana de Diego Olórtegui le dijo que sería buena idea que se dedique a dibujar personajes, ya que él tenía un diseño similar al que Marvel presentaba. Este comentario le abrió las puertas a su mayor sueño.

"No me lo había planteado tan así en serio, no lo había visto como una profesión tal cual. En mis ratos libres del trabajo en agencias y en casas productoras, comencé a preparar un portafolio, porque había visto que los artistas iban a las convenciones grandes, como la San Diego Comicon o la New York, donde había revisiones de portafolio", dijo. Agregó que estos dibujos los publicaba en redes sociales, en las que llegaban a captar varias vistas.

"Ahí es cuando me escriben de Marvel para proponerme hacer pruebas con ellos. Me escribieron el correo. En la primera impresión dije 'ah, esto es una estafa nigeriana', y de verdad lo sentía así, pero lo releí como 10 veces, 15 veces, hasta que dije 'bueno, ya vamos a contestarlo'. Y ahí ya comenzó". Finalmente, en el 2016, justo en el día de su cumpleaños, la empresa confirma que sí requerían sus servicios.

¿Cómo es trabajar dibujando cómics?

Diego Olórtegui contó que este trabajo le apasiona, pero, como cualquier otro, también presenta ciertas dificultades, como lo es el horario: "Es un trabajo que me ha sido muy demandante. Si no me divirtiera tanto, tal vez ya hubiese tirado la toalla, ya que mi horario muchas veces comienza a las 8.00 a. m. y termina las 2.00 a. m. o 3.00 a. m. (del día siguiente). No hay sábado ni domingo ni feriados, es todos los días hasta acabar los proyectos".

Por otro lado, también comenta cómo es el flujo de comunicación. El artista de 35 años señala que, con quien más conversa sobre los cómics, es con el editor: "Yo le digo al editor 'oye, yo creo que se debería de cambiar esto', y el editor se lo dice al guionista, se lo dice al colorista y así".

Sin embargo, también existen aspectos gratificantes, como el reconocimiento de las personas a nivel internacional: "De repente me empiezan a llegar notificaciones de gente en Estados Unidos, en Francia, en Inglaterra, Noruega, cualquier parte del mundo que te puedas imaginar. Me escriben diciendo 'oye, tú dibujaste esto y me ha fascinado', o 'acabo de leer el cómic que has dibujado'. Es lo máximo".

Diego Olórtegui deja una huella peruana en los cómics

Las veces que puede, el dibujante peruano coloca símbolos de la cultura incaica en los cómics que él dibuja: "Con un personaje como La Máscara, que se mete la mano al bolsillo y empieza a sacar infinidad de cosas como si su bolsillo no tuviese fin, yo por ahí dibujo que, entre todas las cosas que saca, saca una cabeza clava. En Capitana Marvel, viendo versiones multiversales de ella, una de ellas está caminando en Machu Picchu. Obviamente, (a veces llego a) dibujar a amistades o a mí mismo dentro de las páginas.

El objetivo del dibujante peruano para el futuro

"Ahora seguir creciendo en todo este rubro, seguir codeándome con los mejores artistas por mi talento y, bueno, creo que, sobre lo del tema de seguir trabajando para Marvel y DC, continuaré por un tiempo porque yo me planteo hacer mis propias historias. Ya tengo escritos algunos guiones. Los tengo más o menos a medias, pero pienso que me gustaría más contar mis historias", reveló Diego Olórtegui.