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Domingo

Polleras, color y pasión

Qarla Quispe, luego de participar en el Latin Fashion Latin Week 2022, en Denver, y en una presentación en Nueva York, alista nuevos proyectos con la humilde indumentaria a la que le da tanta belleza: la pollera peruana.

En su taller showroom de Breña, donde sueña muchos proyectos más. Foto: John Reyes/La República.
En su taller showroom de Breña, donde sueña muchos proyectos más. Foto: John Reyes/La República.

Qarla Quispe decidió un día ponerle polleras al planeta. Tenía razones de sobra para voltear la mirada hacia esa humilde prenda femenina. La abuela María y la abuela Dominga, una de Arequipa y otra de Canta, la inspiraban. La fuerza y el amor de mamá Orfelina también. La pollera, mejor dicho, las polleras de las diversas regiones del país, le han servido para saber cuál era el propósito de su vida.

“Me ha servido para saber quién soy, me ha permitido viajar por el mundo, me ha llevado a estar en las charlas TED dos veces, he viajado incluso hasta al África, he conocido a muchas personas que siempre quise conocer, y solo a través de esta prenda. Además, de ella vivo ahora. ¿Éxito? Creo que el éxito de lo que hago es justamente la filosofía de encontrarme, de enraizarme, de conocerme a través de mis raíces, de cuestionarme de lo que es ser peruana a lo largo de estos 14 años de actividad”.

Qarla se encuentra con mucha actividad en estos días. Ha regresado de Estados Unidos y va a Gamarra, a Breña, a sus talleres, avanza los trabajos pendientes. La artista, diseñadora y emprendedora todavía siente el impacto de su visita a Denver y Nueva York, a donde llevó sus polleras -una de las prendas menos valoradas por el Perú urbano- a un estatus de reconocimiento internacional.

Colecciones mínimas

Tus polleras no son tradicionales. Las modernizas.

Exacto, es una cocreación, una fusión de lo tradicional con lo contemporáneo. Soy una artista plástica que utiliza técnicas europeas que me enseñaron, como el grabado y la serigrafía, pero mi inspiración es el arte popular, las técnicas tradicionales también. Yo trato de unir todo eso para que sea una pieza contemporánea, bajo un concepto. No es el arte por el arte ni la belleza por la belleza. Cada atuendo tiene una historia en particular. Por eso es que tampoco presentamos colecciones de muchas piezas. En la última fueron 10 chicas 10 atuendos.

Eres consciente de que lo que haces puede ser tomado por algunos como una moda, solo para comercializar.

Sí. Pero a mí Warmichic (su marca) me ha servido para hacerme conocida. El tema de la identidad, para mí, está superclaro desde que comencé: cuestionarme qué es ser peruana. A lo largo de estos 14 años me ha servido para saber quién soy y cuál es el propósito de mi vida. Por eso agradezco mucho al proyecto. Me da raíz en la tierra para seguir creciendo.

Te encuentras con lo tuyo.

Sí, gracias a dios. Mi rubro, el concepto mío, no involucra a la moda-moda, entendida como lo fashion, sino a una con más identidad. Yo la llamaría una indumentaria más conceptual. Pienso que hago más indumentaria que moda.

Con otros creadores

Karla Cinthia Quispe Huamaní, tal es su nombre natural, trabaja con una red de creadores de arte popular. En el reciente Latin Fashion Week Colorado 2022, en Denver, representó al Perú y contó con la labor de bordadoras a mano de “Trenzas peruanas”, de Huamanga; con artesanas joyeras de “Tampa Uma”; con creadoras de iconografías de “Amazonía, símbolos y sentimientos” de Tarapoto; con la experta en bordados maquinasqa, Diana Soncco, de Sicuani; con los brazaletes de la gente de Pukaray; y con la música del DJ Kayfex.

La joven creadora, que nunca se ha postrado ante los prejuicios, que estudió diseño gráfico en Senati, artes plásticas y visuales en Bellas Artes, biología en la Universidad Agraria, que recorrió diversas comunidades de Junín para darle forma a su proyecto, que conoció mucho del Perú trabajando con los jesuitas, que ha hecho presentaciones y talleres en Colombia, Argentina, Ecuador, Chile, siente que todos los caminos la conducían a la pollera, a toda la carga cultural que encierra esta prenda.

Con esa convicción, en su taller showroom de Breña reúne a artistas populares, en el proyecto Warmilab. “Allí es donde pongo en práctica el compartir sabiduría, donde artistas populares se hacen presentes, donde se realizan talleres, lo que se recaude en gran parte es para ellos y una parte para la casa”.

Un estudio propio

Las polleras, de procedencia española, caracterizan a muchos pueblos de América. Conocidas son las polleras panameñas, típico traje femenino popular. Hermosas las cholitas paceñas de Bolivia. O las prendas del folclor de la costa caribe de Colombia, también heredadas del vestido español del siglo XVI.

En su charla TED, Qarla Quispe, que también participó en un intercambio cultural en Nueva York y que el próximo año hará otro evento en Nueva Jersey, explicó el aporte peruano de la prenda. “Las polleras peruanas igual proceden de España, pero las peruanas, que siempre tenemos tanto qué decir, le pusimos color, nuestro estilo, eran inicialmente hasta abajo y de algodón pero en los Andes la lana protege más, se empezó a usar material grueso, la bayeta. Tenemos polleras no solo en la sierra sino también en el norte, la del tondero, por ejemplo. Nuestra prenda tiene mucho bagaje cultural”.

Qarla Quispe lleva nuestros colores, nuestra expresión, en cada viaje, en cada desfile. Exporta presencia peruana. Sin duda, es el mejor ejemplo de lo que puede ser una emprendedora que fijó una idea, sus metas y no descansa por ellas.

¿Tu trabajo es más reconocido en el Perú o en el extranjero?

Siento que es más reconocido en el exterior. Por ejemplo, soy artista plástica y no veo que me inviten a colectivos, exposiciones. No hay problema. Igual siento que Lima no lo es todo. La mirada debe ser de afuera hacia adentro, desde la provincia. Actúo cocreando con artesanos y artesanas, plasmando experiencias.

¿Tus polleras tienen historias?

Sí, casi todas tienen historias… Como digo, no es la belleza por la belleza. Siempre tiene un contenido fuerte para que se enraíce y pueda fluir. Por ello, cuando alguien observa mi prenda recuerda haber visto algo que expreso… Algunos, por ejemplo, en el exterior. Se acuerdan de sus abuelas, y hay quienes lloran. Eso me toca fuerte. Es que cuando lo diseñé igual lo pensé. Yo utilizo la moda como pretexto para que el indumento entre, actúe y dialogue con lo demás.

Estudios de Comunicación Social y Periodismo en la Universidad Mayor de San Marcos. Redactor en suplementos Domingo, Rojo y Blanco (regionales), VSD de La República. Editor de Espectáculos en La República. Reportero de deportes en El Gráfico Perú. Editor de Sociedad y Especiales en La República. Coeditor de Política en La República.