Nicole Zignago: "Quiero que mi esencia y mi sello sea mi forma de contar historias"

Por: Sandro Mairata
Nicole Zignago pega un respingo cuando oye la asociación de “Miami = reggaetón”. “Están sucediendo muchas cosas más interesantes que el reggaetón. Hay una escena de muchos ritmos, es uno de los motivos por los que he vuelto para allá”, me dice en la videollamada. Esto porque nunca pensó regresar a Miami, habiendo estado establecida en México, pero ha vuelto en parte para estar más cerca de su hermano Fabián. La menor, Abril, está en el colegio, en Lima. A sus 27 años, Zignago está a punto de lanzar un primer álbum, cuyo título mantiene en secreto; también logró una nominación en el Grammy Latino 2022 como Mejor Artista Nuevo y anda con un nuevo manager que podría convertirla en nuestra nueva artista musical más internacional. Solo no le digan nepo baby.

Estudió en el Berklee College of Music de Boston –donde ingresar ya es en sí un logro– y pese a recibir el apoyo de su padre, Gian Marco, hace tiempo que Nicole vuela en solitario. En 2020, tras un tiempo como YouTuber y un par de créditos como compositora, lanzó los temas que dieron forma a un primer EP que apareció en 2021 titulado Así me siento hoy. A su popularidad en redes le siguió el pequeño tumulto ocasionado por darse a conocer como miembro de la comunidad LGTB y su romance con la futbolista mexicana Fernanda Piña, de quien ya está separada.

De paso por Lima, Zignago presentó en vivo, para diversos públicos, su nuevo material, entre el cual destacan los sencillos promocionales “No quiero olvidarte” y “bubble gum”. Este segundo hace referencia de forma erótica a la relación entre dos mujeres: “Sin panty, no problem / conmigo, toda la noche en 69 / mm, mm, mm / te quiero así / pegadita a mí / like bubble gum, bubble gum”. “No quieran encajar mi música en que solo sea para gente de la comunidad (LGTB)”, dice. “Siento que simplemente hablo del amor desde mi perspectiva y cualquier persona se puede relacionar. Y mi música encaja y es para para todos y para todas”.

Asistí a una de las presentaciones en vivo para prensa y medios, en la galería Dédalo de Barranco, y si hay algo que dio esperanzas fue presenciar a una artista de voz potente y prístina empuñando una guitarra para hacer un pop atrevido e inteligente. Sin Auto-Tune, sin el facilismo bobalicón de buena parte de lo que hoy se conoce como “música urbana”. Solo voz, guitarra y mucha actitud.

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Esencia y sonido

“Saqué mi EP ‘Así me siento hoy’ para encapsular y ponerle fin a esa era”, cuenta Zignago, consciente de que lo lanzado en 2021 y hoy son dos versiones de una misma artista “que da lo mejor de sí en cada momento. (…) Hoy te diré ‘esta es la Nicole más auténtica y probablemente en un año más, cuando saque otro hijo, te diré ‘no, Sandro, esta es la Nicole más auténtica’”. Mucho más cercana en su estilo y estética musical a una Natalia Lafourcade que a una –digamos– Karol G, Nicole Zignago transmite una calma y parquedad algo inusual entre los artistas: contesta las preguntas con amabilidad pero no se muere por llenarte de información sobre ella misma. No puedo evitar comentarle que entrevisté a su padre allá por 2005 y la vi de muy nena y que cuesta creer cómo pasa el tiempo.

Gian Marco anunció en 2021 su separación, después de 25 años de matrimonio, de Claudia Moro, madre de Nicole y sus dos hermanos, sin dar muchos detalles a la prensa. Eso sí, luego contó en una entrevista que después de firmar los papeles de divorcio hizo algunas preguntas privadas a sus hijos, entre ellas: “¿Qué opinan de mí?”.

Cuando le recuerdo a Nicole de su experiencia en los Grammys, me dice que “es raro porque de repente hay gente que comienza a la par que tú y gente que comienza después, pero sigue siendo considerada de la nueva ola. Sí, siento que mi música sigue y yo sigo perteneciendo como a la nueva camada de generaciones de artistas que estamos comenzando a sacar música. Justo lo decía, siento que no llevo 25 años haciendo esto sino como 50 años, pero a veces siento que llevo un mes. Es bonito tener esa sensación porque te mantiene al borde todo el tiempo, queriendo hacer más cosas, queriendo trabajar teniendo un norte muy claro”.

La música de Zignago parte de un sentimiento melancólico, de carencia o de despedida, algo que ella reconoce. “Disfruto mucho de la nostalgia”, dice. Luego reflexiona: “Siento que eso va a ser como un cambio súper constante todo el tiempo. Al final del día quiero que mi esencia y mi sello, más que el sonido, sea mi forma de contar historias, y mis letras. Siento que eso es lo que yo llevo cargando desde el comienzo. Y quiero darme siempre la libertad de poder expresar y vestir mis letras de manera distinta cada cierto tiempo. Para este disco que viene me he tomado el tiempo de escribir un guion, una historia, un comienzo y un final, algo que tenga como muchísima coherencia. Como te digo, no solamente en las letras, en la lírica, pero también los sonidos que elegí para vestir las canciones, todos son muy hermanos entre sí y vienen como de la misma familia. Me ha tomado mucho tiempo hacer eso. Lo disfruté mucho, fue como entregar un paquete que quedó completo, con una historia que se cuenta de arriba abajo”.

Todo esto vendrá envuelto en el sentido estético de sus influencias indies. En su playlist de Spotify navegan nombres pocos conocidos para el gran público como Muna (banda estadounidense de indie pop), Holly Humberstone (cantante británica) y Sabrina Carpenter, la joven rubia que derrochó sensualidad como telonera en la gira de Taylor Swift. “Es bonito honrar lo que estoy haciendo ahorita y probablemente en un par de años, cuando saque mi siguiente disco voy a honrar lo que sea en ese momento y quiero seguir cambiando y evolucionando y convertirme no solamente en una mejor versión de mí como mejor persona, pero también como profesional y como artista y como música”, me dice. “Es bonito. Al final del día disfruto mucho crear y jugar y eso es lo que voy a hacer el resto de mi vida”. Aprovechando que hablamos de Taylor Swift le pregunto si es “Swiftie”.

No demora mucho para sonreír y responderme: “Por supuesto. Soy muy Swiftie.”