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"Shakira está resentida con Colombia por cómo la trataron": Edgar García, autor de la biografía de la cantante

Edgar García, periodista colombiano y el hombre que descubrió a Shakira, brinda detalles de las obras que hizo la cantante en Colombia, como la construcción de una biblioteca en una cárcel y colegios para sus compatriotas.

Edgar García Ochoa reveló detalles inéditos de la vida juvenil de Shakira en Colombia. Foto: Composición LR / Edgar García Ochoa
Edgar García Ochoa reveló detalles inéditos de la vida juvenil de Shakira en Colombia. Foto: Composición LR / Edgar García Ochoa

Edgar García Ochoa es un periodista de renombre en Colombia. Además de ello, tiene el talento de descubrir nuevos artistas, y una de ellas es nada más y nada menos que la mundialmente conocida Shakira. Con solo 10 años de edad, Edgar García la conoció por medio de su padre William Mebarak y fue el encargado de llevar a la barranquillera a sus primeras presentaciones para ser descubierta por el mundo, posteriormente. Es así que, en sus memorias, el periodista decidió escribir "Shakira y mis recuerdos", biografía autorizada que saldrá a la venta el próximo mes de mayo. En la presente entrevista, Edgar García Ochoa "Flash" comenta detalles no conocidos de Shakira en su niñez, las obras sociales que desarrolló con ella en favor de los colombianos, su posible entrada a la industria audiovisual con una serie de televisión y la construcción de un monumento en honor a la intérprete en su natal Barranquilla.

Portada oficial del libro "Shakira y mis recuerdos", que será publicado en el mes de mayo. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

Portada oficial del libro "Shakira y mis recuerdos", que será publicado en el mes de mayo. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

—Usted es un periodista reconocido en el Atlántico y el Caribe, en Colombia. ¿Cómo fue descubrir a Shakira siendo ella tan joven?

—En ese momento, yo me consideraba un influenciador a pesar de que no existían las redes. Shakira tenía 10 años cuando su papá William iba a medios de televisión y radio sin éxito, porque la rechazaban o no la llamaban de vuelta. Entonces, Shakira le pidió a su padre verme, quedamos en reunirnos en un restaurante. Y yo le digo, qué bonito que quiera verme y ella me dijo: “No, porque yo soy tu lectora”. A esa edad ya bailaba árabe, y la llevé a los cumpleaños de quinceañeras que apoyaba en esa época. La sorpresa es que ella cantó canciones de su autoría, con solo 10 años. Ahí comenzó mi historia con ella.

Shakira cuando era niña, cantando en el programa de televisión de Josefina Torres. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

Shakira cuando era niña, cantando en el programa de televisión de Josefina Torres. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

—¿Fue en ese momento que se dio cuenta de que ella sería mundialmente famosa?

—En ese momento no. Cuando Shakira cumplió 15 años, su fiesta se realizó en un hotel de lujo. Yo no pude asistir porque tenía un compromiso en una correría taurina, pero le pedí a mi novia Lourdes que me guardara algún souvenir y le dije: “Esa niña va a ser la número uno en el mundo”. Lourdes al final me guardó 10 servilletas que dicen “Shakira 15 años”.  

—¿Cómo se dio el permiso de escribir una biografía de sus primeros años de carrera?

—Su papá la leyó y la aprobó. Y él es fregado, tiene un carácter fuerte y cuando algo no le gusta, no es. Una vez nos peleamos, y cuando hubo un concierto, me mandó 20 boletas para hacer la paz y su mamá me envió 30 boletas. Para mí, se parece a Onasis, el naviero. Ya tiene 91 años y está delicado de salud, pero es un hombre muy inteligente.

—Jaume Struch rechazó el primer casete de Shakira en 1991 y ahora lo quiere vender por 1.300 dólares. ¿Escuchó sobre él? ¿Qué opina de ello?

—Claro. No lo conozco, pero, así como él, hay una cantidad de productores que no le dieron importancia y ahora están arrepentidos. Yo conservo aún servilletas de sus 15 años, pero no sería capaz de venderlas. Es algo que yo atesoro mucho.

Y, mira, cuando ella comenzó a coger mucha más fama, yo creía que ella no se acordaría de mí, porque lo que yo hice no creí que era nada del otro mundo. Pero un día recibo una llamada de su papá, diciéndome que querían invitarme a Viña del Mar porque yo era el único que les había ayudado y estaban agradecidos conmigo. También me invitaron a Nueva York y Miami para los premios Lo Nuestro, con todo pagado por 20 días. Es una mujer muy agradecida.

—Usted construirá un monumento en honor a Shakira en Barranquilla. Coméntenos sobre ello.

—Empezó un ciclo de vida con una niña que tenía 10 años y la impulsé artísticamente. Terminando este libro, ese ciclo finaliza ofreciéndole un monumento en su honor en Barranquilla. Y así lo haré. Aquí, en Barranquilla, suelen verse monumentos de artistas colombianos, y a Shakira se lo envió un fan alemán, pero ahora se encuentra oxidado. Pero Colombia todavía no le ha hecho un monumento y se lo voy a hacer yo. Será financiado por mí, mis amigos influyentes y mis lectores… Bueno, yo he hecho muchas cosas grandes y esa meta no me parece imposible. Queda registrado.

Una Shakira joven en una sesión de fotos. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

Una Shakira joven en una sesión de fotos. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

—¿Y Shakira tiene conocimiento de esto?

—Usted puede imaginar que Shakira tiene familia aquí, en Barranquilla. Pero ella ve mi página y hace tres meses me llamó. Hablamos largo rato, pero no pudimos hablar del libro ni del monumento. Más bien, me preguntó sobre una foto que subí de ella en mi página y así supe que sabe las cosas que publico.

—¿A qué se refiere cuando dice “termina un ciclo”?

—A un ciclo de ilusión, de emoción. Un ciclo en el sentido personal, a que la conocí cuando era una niña de solo 10 años y, ahora, después de tanto tiempo, planeo hacer el monumento para ella.

—¿Qué sorpresa tiene para el monumento?

— Yo creo que Shakira debería venir a inaugurarlo. La idea que tengo es que el monumento se construya con las armas que entreguen los delincuentes y las que decomisen a los guerrilleros también y las vamos a convertir en un material. Sería un monumento a la paz y ella sería la madrina de todas esas armas. Lo vamos a convertir en algo beneficioso.

—¿Tiene alguna fecha estimada para la inauguración del monumento?

—No. Primero tiene que salir el libro que será publicado en mayo. Luego, comenzamos a hacer el monumento y, por último, que esta es otra sorpresa… Vino un productor de Estados Unidos, Andrés Salgado, que ha hecho muchas novelas conocidas y me comentó que está interesado en hacer también una serie del libro. Aún está en conversaciones, pero es algo que me apasiona y emociona mucho.

—Durante su carrera, usted ha realizado muchas obras de ayuda social. ¿En alguna de ellas Shakira lo ayudó? ¿Cuál fue?

—Por supuesto. En el año 1998, Shakira se enteró de que quería hacer una biblioteca en una cárcel donde yo tenía un amigo que estaba preso. Recuerdo que ella estaba por lanzar la canción “Y dónde están los ladrones”. Entonces me dijo que me iba a ayudar y que ella pagaría todo lo que se necesite, y así llegamos a juntar 28.000 libros para la biblioteca. Y ella la inauguró. Fue a la cárcel y pidió entrar al pabellón donde estaban los presos.

Shakira y Edgar García Ochoa durante la inaguración de la biblioteca en una cárcel. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

Shakira y Edgar García Ochoa durante la inaguración de la biblioteca en una cárcel. Foto: Edgar García Ochoa "Flash".

—¿Todavía existe esa biblioteca?

—Ya no. Cambiaron el director del penal y utilizó la biblioteca como oficina particular.

—Shakira es una estrella internacional, pero ha decidido irse a Estados Unidos, ¿por qué no volver a Colombia?

—Bueno, creo que hay varias cosas que hasta a mí me sorprenden. Tengo la impresión que está resentida con Colombia, por cómo la trataron. Y ella hizo muchas obras aquí con su fundación, hizo muchos colegios y muy grandes. Pero, bueno, por ejemplo, en toda su trayectoria musical no ha trabajado con músicos colombianos.

—Shakira recientemente ha pasado por un momento difícil a nivel sentimental. Muchos hombres de prensa han abordado sobre el tema, ¿qué diría sobre ello?

—Yo te voy a contar una anécdota. Cuando Shakira era pequeña, yo la llevé donde una mentalista muy famosa en Bogotá y le leyó la mano. Y es curioso porque le está sucediendo todo lo que le dijo. Este tema del futbolista realmente ha sido muy doloroso. Y la prensa española no tienen piedad con ella, y lo mismo pasa con los periodistas argentinos y mexicanos. Incluso, el discurso que dio él (Gerard Piqué) sobre los latinoamericanos, que también salpica al Perú, pues bueno, yo soy muy taurino y cuando el toro no es de raza se le pone una bandera negra. Así que hay que darle una bandera negra.

Comunicadora por la Universidad de San Martín de Porres (USMP). Con 6 años de experiencia en áreas de la comunicación como redacción, diseño y diagramación, cuentas y CM. Interesada en noticias del Perú y el mundo.